Inauguramos sección en Partido-Likidado.
Todos los martes saldremos en defensa de los personajes más puteados del ambiente futbolístico. Porque es fácil estar al lado de un monitor, mirar la jugada tres veces y decir lo que tuvieron que haber cobrado. Ganen, pierdan o empaten todos los putean y se olvidan de los huevos que hay que tener para llegar a ese lugar. Así que, desde acá, nuestro homenaje a los árbitros del fútbol argentino.
El post debut estará dedicado a una gloria del pito argentino. Luego a partir del próximo martes nos detendremos en las jugadas polémicas de la fecha, pero no para hacernos los justicieros con 48 monitores adelante y dos días después, sino para hacerles el aguante... De todos modos no nos vamos a quedar con las ganas de mandarlos bien a la mierda, ya es una costumbre.
Javier Castrilli tiene huevos señores. Muchos huevos. Quién se le puede plantar a Maradó de la manera que se plantó él. Cobrar penales era su hobby y ni hablar de llevarse el protagonismo. Sin dudas marcó una época y nadie podrá igualarlo, claro está, nadie volverá a tener sus huevos. Cómo olvidarte Javier, hasta quisiste echar a un camarógrafo.
"Castrilli hijo de puta, la puta que te parió... Castrilli hijo de puta, la puta que te parió..." Tenías que soportar todos los domingos y sin embargo hacías tu trabajo al píe de la letra. Sos un ejemplo, tenés la mamá más puteada de La Argentina y todavía no saliste a los tiros por la calle.
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